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PRIMER BLOG DEDICADO A LA DESERTIFICACION Y SU TEMÁTICA EN CHILE Y EL MUNDO RODRIGO GONZALEZ FERNANDEZ, Y UN GRUPO DE PROFESIONALES BUSCA CREAR UN POLO DE DESARROLLO EN EL DESIERTO CHILENO Y CUIDAR POR LOS DESIERTOS DEL MUNDO. ACUMULAREMOS INFORMACIONES DE TODO EL MUNDO PARA LOGRAR NUESTRO OBJETIVO UN DESIERTO PRODUCTIVO PARA CHILE Y EL MUNDO CONTACTOS: CELULAR: 93934521 CHILE
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Staff/ntrzacatecas.com
Martes 8 de Septiembre de 2009
México, D. F.- Si a usted le dijeran que los seres humanos afectamos más al planeta que el meteorito que generó la extinción de los dinosaurios que habitaban la Tierra hace 65 millones de años, seguramente calificaría la aseveración como una locura. El problema es que la afirmación es cierta.
El hombre está generando un efecto de esas dimensiones, advierte el biólogo José Sarukhán Kermez, coordinador de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio). "El impacto es más sutil, pero el cambio que está generando la actividad humana es de esa magnitud. Es una modificación de las condiciones del planeta y la contribución de los mexicanos está entre los primeros lugares del mundo".
Los recursos naturales de México son únicos. A pesar de representar sólo 1 por ciento de la superficie terrestre, su diversidad biológica resalta al ser comparada con la de muchos otros países, pues forma parte de las 12 naciones megadiversas en la orbe. Sin embargo, la irracionalidad de su uso, la sobreexplotación de los ecosistemas y el impacto del crecimiento económico han provocado un severo deterioro ambiental, alertan investigadores y ecologistas en el documento Capital Natural de México, coordinado por la Conabio.
De finales de la década de los 70 hasta 2000 se perdieron en México más de 84 mil hectáreas de cobertura vegetal, de acuerdo con estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). En cifras conservadoras de la propia institución, cada año se deforestan 314 mil hectáreas, de 2001 a la fecha. Los ambientalistas difieren y aseguran que el promedio anual de pérdida supera las 500 mil hectáreas. Estos porcentajes de pérdida nos colocan en el cuarto lugar mundial. La cobertura forestal de México es de 56 millones de hectáreas en total.
La mitad de la cobertura vegetal del país ha sido eliminada, con la consecuente e irreversible transformación de los ecosistemas. El desarrollo agropecuario, ganadero y el crecimiento de las zonas urbanas han arrasado con cientos de especies de flora y fauna que, por sus características endémicas, desaparecieron del planeta en unas cuantas décadas, coinciden ambientalistas e investigadores.
Según el estudio Transformación de los Sistemas Naturales de México del Instituto Nacional de Ecología, actualizado hasta 2007, la superficie deforestada anualmente por tipo de vegetación muestra esta tendencia: 51 por ciento afecta a selvas, 34 por ciento a bosques y 15 por ciento a zonas áridas.
"Nuestro país ha perdido más de 95 por ciento de sus bosques tropicales húmedos (incluyendo selvas perennifolias y bosques mesófilos), más de la mitad de sus bosques templados, y un porcentaje difícil de cuantificar de los recursos de sus zonas áridas y desiertos naturales, pero que sin duda también representa más de la mitad del acervo original", se advierte en la citada investigación.
(Con información de El Universal)
Etiquetas: México Desertificación
Argentina, un país joven ambientalmente en terapia intensiva | |
¿Puede haber un desarrollo sustentable con la contaminación y desertificación existente? "Problemas ambientales son aquellos aspectos de la relación entre la sociedad y el medio ambiente físico (transformado o no) que generan directa o indirectamente consecuencias negativas sobre la calidad de vida de la población presente y futura" (párrafo del libro "Las utopías del medio ambiente"). Por Hugo César Renés | |
Modelos y datos meteorológicos indican que en los últimos 50 años se redujo progresivamente la capacidad de absorber el carbono por parte de los depósitos naturales de este gas "invernadero" presente en la tierra y los océanos. En ese mismo período las emisiones de carbono aumentaron constantemente convirtiéndose en una situación crítica entre 2000 y 2009. La destrucción de la cubierta vegetal, la escasa reserva de humedad en los suelos y su erosión desertificaron ya el 35% de la superficie terrestre continental a nivel mundial. Nuestro país no es ajeno a esa realidad. En la Argentina disfrutamos casi sin darnos cuenta la diversidad que ofrece la naturaleza. El oxígeno que respiramos, esencial para la subsistencia de los seres vivos, proviene directamente de las plantas. No obstante, la ignorancia de algunos y la falta de escrúpulos de otros, están poniendo en peligro tanta bonanza natural. La falta de planificación en las diversas actividades agrícolas, mineras, industriales y domésticas, están provocando alteraciones no controladas en el sistema natural y sobre el suelo en particular. De estos efectos puedo mencionar, entre otros muchos, el impacto en la salud de la población, la reducción de las fuentes de agua potable y la reducción del área agrícola aprovechable, en términos de superficie y de fertilidad. De lo expresado en el párrafo anterior surge que las principales cuencas acuíferas que surten de agua potable a la población se hallan contaminadas de distintas formas, entre las cuales las más difundidas, como quedó dicho, son las que derivan de verter en sus cauces líquidos cloacales o industriales sin tratamiento previo, que contienen contaminantes químicos muy diversos que a la postre terminan siendo absorbidos por vía directa o indirecta. La escasa reserva de humedad en los suelos de la región del oeste y el sudoeste bonaerense, La Pampa, San Luis y el sur de Córdoba, producto de la aguda sequía que afecta desde hace varios años a esas regiones, está afectando gravemente la actividad agrícola y ganadera. Debemos tener presente que las fuerzas más potentes que produjeron los mayores efectos en la historia de la tierra han sido, por lo general, las más silenciosas. En particular he de advertir hoy el tan adelantado proceso de desecación o desertificación de nuestro suelo; el del planeta lo dejo librado a su interés por investigarlo. Somos seres que habitamos tierra firme y nuestra existencia depende de la de otros seres que también viven en ella. La lenta pero sostenida desaparición del agua es hoy un hecho de suma gravedad, porque cuando el suelo se queda sin agua, los bosques más frondosos y las praderas más espléndidas, se convierten en estériles desiertos. Veamos que está pasando en nuestro país: En los últimos 70 años la reducción de la superficie forestal nacional alcanzó el 66%, siendo la región chaqueña una de las más afectadas por el fenómeno. El 28% de los suelos de lo que ayer fue considerado el granero del mundo están sujetos a procesos de erosión, habiendo algo más de 22 millones de hectáreas ayer cultivables (un poco más del 10% del total) directamente degradadas, es decir de improbable recuperación; la superficie boscosa original se redujo a menos de un tercio, talándose algo más de 30.000 hectáreas por año, a esto debemos agregarle la deforestación producida por el fuego que normalmente afecta a provincias como Córdoba, San Luís, Chaco, Santiago del Estero y la zona patagónica andina. Se estima que cada año se suman al deterioro ecológico unas 650.000 nuevas hectáreas. La realidad de este proceso de desecación/desertificación nos está revelando cuáles han de ser las consecuencias más graves que la carencia de agua y la infertilidad del suelo producirá en nuestro país: migraciones internas, hambre, pobreza, conflictos sociales y cambio climático Recuerde usted que hasta no hace mucho teníamos (o creíamos tener) las mismas posibilidades de desarrollo agropecuario que Canadá y Australia, pero la lenta formación de desiertos en lugares en donde no hace mucho tiempo eran reconocidos como prósperas zonas de producción agrícolas y/o ganaderas junto al grave problema conceptual/ideológico existente en el matrimonio Kirchner que le ha hecho adoptar políticas erróneas, nos van sacando progresivamente de aquella ilusión competitiva. Si seguimos devastando los montes/selvas a pesar de ser tan valiosos (y año tras año lo estamos haciendo con más rapidez) sin pensar más que en el momento actual, descuidando las necesidades futuras, las consecuencias serán gravísimas. ¿No se pueden construir acueductos que lleven el agua que en otras regiones producen inundaciones o tienen en exceso, a aquellas que padecen sequía? En el valle medio y alto valle de Río Negro y Neuquén se pudo, ¿recuerda lo que era aquello? ¿Le importará esto al actual Gobierno y a sus burócratas? El supuesto "modelo de desarrollo sustentable" cristikirchnerista ¿incluirá estrategias de prevención y control ecológico como para contrarrestar la erosión, deforestación, desertificación, contaminación del suelo y el efecto "invernadero"? Teniendo en cuenta que el comportamiento de la pareja presidencial habla por ella, creo que como el medio ambiente y la ecología no producen dinero contante y sonante sino todo lo contrario, necesitan inversión, no les importa, (qué propósito o incentivo puede tener que el presupuesto para el 2010, que ya aprobaron los representantes del pueblo -nuestros representantes-, prevea una partida de dinero inferior en $520 millones a lo que establece la Ley 26.331 para el Fondo de Protección de los Bosques Nativos), pero les aseguro que para el pueblo argentino esta realidad que día a día se agrava, será una desgracia, porque toda la vida humana depende del agua y de las hojas verdes. En azul y blanco. Más información www.politicaydesarrollo.com.ar Contáctenos: politicaydesarrollo@gmail.com Para suscribirse editor_politicaydesarrollo@yahoo.com.ar |
la desalinizacion de aguas de mar
El negocio de la desalinización de agua de mar es espectacular y se hace necesario en Chile. En efecto, acá tenemos potenciales clientes : ciudades- consumo humano- Agricultura ( Polos de desarrollo en el desierto. ) y Mineria.
Chile ya debería tener proyectos en grande para habilitar tierras desérticas y generar progreso.
El gran comprador de aguas puede ser la minería.
El Gobierno debería traer tecnología e inversiones de Israel, país en que cada dia surgen nuevas tecnologías. Hoy conducir aguas no es misterio como tampoco es el uso de tecnologías de regadío.
www.desertificacionchile.blogspot.com
G. Orellana, N. Torres y A. Ortega
Si hay algo que falta en un desierto, eso es el agua. Y en el lugar más árido del mundo, nuestro Desierto de Atacama, la escasez se está transformando en algo dramático para las ciudades, la agricultura y la minería.
Como muestra un botón: en la Región de Atacama (la más afectada), sólo se usa el 12% de los derechos de agua legalmente constituidos, lo que se debe a que no hay más recursos disponibles. Esto ha generado una pugna entre la minería y la agricultura, que se acusan mutuamente de sobreexplotar el agua.
Lo anterior ha llevado a varias empresas a poner el ojo en un negocio relativamente desconocido en Chile, pero que de a poco comienza a tomar forma: la desalinización de agua de mar.
¿Cómo funciona este sistema? ¿Qué tan caro puede ser? Según empresas que ya desarrollan ideas al respecto, el costo de un metro cúbico de agua de mar fluctaría entre US$ 0,6 y US$ 1 -dependiendo de la pureza-, es decir unos $0,5 por litro.
En comparación, el litro de agua para consumo humano cuesta en Santiago $0,3. En Antofagasta, donde parte del abastecimiento proviene del mar, un litro cuesta $1,1.
El valor de $0,5 por litro al que se venderá el agua de mar , eso sí, considera sólo el producto puesto a la salida de la planta, que debe estar cerca del mar. Transportarla hacia el interior -en el norte hay que sumarle la altura- cuesta bastante más, por el uso de electricidad que requiere.
Se trata de un proceso industrial presente en Chile desde hace algunos años, pero a escala menor. En los 90' se comienza a hablar, por primera vez, de esta tecnología para suplir la carencia del recurso en la minería en el norte. Pero la primera planta no se construyó sino hasta 2001 en Antofagasta, por parte de la filial de OHL Desalant, que abastece a la ciudad de Antofagasta de agua potable. Hoy está en proceso de ampliación, tras ser comprada por la sanitaria Aguas de Antofagasta.
En 2006, Escondida finalizó la construcción de una unidad similar en Puerto Coloso, en la misma ciudad, para entregar el recurso a sus operaciones.
No obstante, la primera unidad de este tipo en el mundo se construyó en 1964 en la ciudad de Lanzarote, en España. En ese país, precisamente, está la zona del mundo con más plantas de este tipo: Islas Canarias, donde funcionan más de 300 debido a que allí no existen ríos y las aguas subterráneas son insuficientes para satisfacer la demanda industrial y humana.
Pero el negocio no se circunscribe sólo a la desalinización de agua de mar. Algunos procesos mineros requieren una pureza menor, porque es para fines industriales. Pero el agua para beber requiere una pureza de 100%, lo que dispara los costos, ya que requiere un uso intensivo de energía.
Convertir desiertos en bosquese es la solución para detener el cambio climático la idea consiste en plantar árboles como eucaliptos, para cubrir el Sáhara o el desierto australiano.
Agroinformación-Convertir desiertos en bosques. Es la solución que un equipo de biólogos y climatólogos ha presentado para detener el cambio climático. La idea consiste en plantar árboles de crecimiento rápido, como eucaliptos, para cubrir el Sáhara o el desierto australiano.
Estas zonas arbóreas estarían regadas por agua de mar, que se trataría en una cadena de plantas desalinizadoras y sería canalizada hacia los bosques por plantas de regadío.
Este nuevo manto de árboles crearía lluvias y un microclima propio, a la par que succionaría dióxido de carbono de la atmósfera. Los 'desiertos arbolados' podrían retirar aproximadamente 8.000 millones de toneladas de carbono al año, la misma cifra que se emite actualmente a causa de los combustibles fósiles y la deforestación.
El responsable de este plan es Leonard Ornstein, biólogo celular de la escuela de medicina Mount Sinai en Nueva York, junto con Igor Aleinov y David Rind, expertos en clima de la NASA. sus creadores afirman que "probablemente proporcione la mejor ruta a corto plazo para controlar los gases de efecto invernadero".
El coste de esta idea rondaría los 1,35 millones de euros al año. Sus creadores afirman que la solución es económica en comparación con el resto de propuestas existentes. Además, según Ornstein, es la única solución enfocada a solucionar el problema.
Críticas
La idea de utilizar la forestación como arma para combatir el cambio climático ya se había debatido antes En la mayoría de lugares donde había sido propuesta, como Canadá o Siberia, se teme que al eliminar la capa de nieve que refleja la luz del sol podría producirse un mayor calentamiento de la Tierra que anule el enfriamiento pretendido. Ornstein afirma que las regiones subtropicales no existiría este problema.
Ornstein afirma que Arabia y varios países del Magreb también podrían sumarse a esta idea que, además impulsaría el empleo en estas regiones y proporcionaría una fuente de madera para ser utilizada como biofuel.
La iniciativa ha sido recibida con diferentes críticas, que afirman que el desierto es un ecosistema complejo que sería destruido. Ornstein ha respondido que "si hay que realizar sacrificios para controlar el calentamiento global, los ecosistemas casi inexistentes del Sahara central y el desierto australiano parecen candidatos razonables, comparados a las alternativas".
La trascendencia que Marruecos ha querido dar al anuncio de este proyecto es tal que en la presentación no solo ha estado buena parte del gobierno, sino que estaba presente el monarca alauí, Mohamed VI, el cuerpo diplomático acreditado en el país y la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, de visita oficial en Marruecos.
El proyecto se concreta en la construcción y puesta en funcionamiento de cinco centrales solares, dos de ellas en el Sáhara Occidental, en un plazo de diez años. El plan se desarrollará sobre una superficie de 10.000 hectáreas y en él se invertirán 6.120 millones de euros. El objetivo del gobierno marroquí es aprovechar las 3.000 horas de sol anuales para reducir la dependencia energética del exterior, que ahora mismo es prácticamente total, un 96%.
En las cinco plantas se instalarán 2.000 MW que producirán unos 4.500 GW/h. La puesta en funcionamiento de la primera, de 500 MW, está prevista para 2015 y se construirá en Uarzazat. Las siguientes serán las de Ain Bni Mathar, al norte del país, y la de Sebkhat Tah, al sur. Las otras dos se ubicarán en el Sáhara Occidental, junto a El Aaiún y en Cabo Bojador.
El proyecto se ha planteado de tal manera que Marruecos aportará parte de los más de 6.000 millones de euros presupuestados y garantizará la diferencia de precio entre el coste actual de la energía y el coste de la energía producida en las plantas solares. Además, se espera la participación de empresas extranjeras. El ministro de Economía marroquí, Salahadin Mezuar, ha asegurado que cuenta con la ayuda de España y Alemania a los que ha mencionado como los países "más avanzados en la relacionado con las energía renovables".
Más información
www.maroc.ma
UNA POSIBILIDAD PARA EL DESIERTO CHILENO
USA - Guayule: ¿Una fuente de biocombustible para el futuro?
FUENTE: Marcia Wood, USDA-ARS
El excelente látex natural que proviene de un arbusto del desierto llamado guayule hace guantes de alta calidad, aparatos médicos, y otros productos deseados a base de goma natural.
Pero el guayule también podría ser una fuente económica y amigable con el medio ambiente de otro recurso valioso: energía. Esto es según química Colleen M. McMahan, quien trabaja en el Centro de Investigación de la Región Occidental mantenido por el Servicio de Investigación Agrícola (ARS) en Albany, California.
La bioenergía puede ser producida de las ramas y los tallos molidos del guayule, después de la extracción de su látex blanco y rico en goma, según McMahan. Los sobrantes--un material blando semejante al serrín, y llamado bagazo--proveen de 8.000 a 9.000 de Btu de energía por libra, casi igual que el carbón.
Los colaboradores de McMahan incluyen químico Kevin M. Holtman en el centro del ARS en Albany, quien ya ha producido cantidades pequeñas de etanol del guayule, y ingeniero químico Akwasi Boateng en el Centro de Investigación de la Región Oriental mantenido por el ARS en Wyndmoor, Pensilvania. Boateng quiere convertir el bagazo del guayule en un bioaceite o en un gas sintético.
El guayule ofrece muchos beneficios como una fuente de biocombustible. No es un cultivo de alimento o de pienso, así que usárlo para la producción de energía no competirá con esos usos. Los arbustos de guayule se pueden cosechar por primera vez tan temprano como dos años después de plantación, y ellos son listos para cosechar otra vez en aproximadamente 18 meses.
El bagazo y el látex del guayule son disponibles por todo el año. La única otra materia prima de biocombustible ahora disponible continuamente es basura (residuos sólidos municipales).
Adicionalmente, el guayule crece bien en ecosistemas cálidos y secos donde otros cultivos de biocombustible no crecen bien. El arbusto robusto requiere menos fertilizante que otros cultivos actualmente producidos en el desierto del sudoeste. Aunque unos herbicidas se necesitan durante el período de establecimiento de las plantas de guayule, cuando las plantas ya estén establecidas, no hay necesidad para aplicar más herbicidas--o para utilizar sustancias químicas que controlan insectos u hongos perjudiciales o los gusanos llamados nematodos.
PUBLICADO: 25/02/2009
FUENTE: Marcia Wood, USDA-ARS
por Orlando Torricelli
Artículo publicado el 12/10/2009 Ultima reactualización 12/10/2009 10:32 TU
Recientemente concluyó en Buenos aires la IX cumbre de los 193 países firmantes de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación.
Un debate centrado sobre el impacto del cambio climático en las tierras secas.
Según estimaciones de la ONU, se estima que en 2020 la desertificación obligará a cerca de 135 millones de personas a abandonar sus hogares en busca de una vida mejor.
La desertificación cuesta a la economía mundial cerca de 42 mil millones de dólares por año y el coste humano es incalculable, pues las opciones de desarrollo de las poblaciones de los países del Sur están estrechamente vinculadas a la tierra
Entrevistado: el agrónomo y bioclimatólogo Fernando SantibáñezBBC Mundo (Reino Unido) / Por Veronica Smink
El 68% de la superficie de América del Sur tiene problemas vinculados a la degradación del suelo, lo que impacta gravemente en la productividad de una de las principales regiones agro-exportadoras del mundo.
La preocupante situación que enfrenta el subcontinente es uno de los temas que se abordaron en estos días en Buenos Aires durante la novena Conferencia de las Partes de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CNULD).
El encuentro entre los representantes de las 193 naciones que conforman el órgano de la ONU busca poner en marcha medidas para luchar contra la desertificación, que a nivel mundial provoca una pérdida del 1 por ciento de la productividad del suelo cada año.
Es por eso que el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, dijo en un mensaje a los asistentes a la cumbre en Argentina que la degradación de la tierra se encuentra "entre los desafíos ambientales mundiales más apremiantes de nuestro tiempo".
La tierra es como un banco, si uno saca y saca y no repone, se quebrará
Richard Byron-Cox, responsable para América Latina del la CNULD
El responsable para América Latina del la CNULD, Richard Byron-Cox, habló con BBC Mundo sobre la importancia de revertir la situación en esa región, ya que la baja en la productividad agrícola como consecuencia de la desertificación afectará el acceso mundial a alimentos.
"La tierra es como un banco, si uno saca y saca y no repone, se quebrará", ilustró.
Abuso humano
En ese sentido, el experto señaló que las malas prácticas agrícolas están contribuyendo a empobrecer el suelo sudamericano, que también se ve afectado por otros factores, como la erosión provocada por la deforestación.
Se estima que el sobrepastoreo ha afectado a unas 70 millones de hectáreas en la región mientras que otras 100 millones fueron degradadas por la destrucción de bosques.
Es por eso que las claves para revertir el proceso tienen que ver con un mejor conocimiento y uso de las tierras, y con la plantación de árboles que protejan el suelo.
"La gente tiene que recibir educación sobre las capacidades de la tierra y la baja en productividad que genera el uso excesivo de los suelos", afirmó Byron-Cox.
"También es importante que se estudien con cuidado los sistemas de agroforestación, y se aprenda cómo plantar bosques que permitan el desarrollo de la agricultura", agregó.
Alentador
A pesar de que las perspectivas son preocupantes, el funcionario de la ONU se mostró optimista sobre los avances logrados en los últimos años.
"Noto un gran esfuerzo por parte de los gobiernos, las organizaciones sociales y en particular los jóvenes para informarse y actuar para revertir el problema", se esperanzó.
Una de las "historias de éxito" que resaltó fue el trabajo realizado en la zona conocida como el Gran Chaco, la enorme región que se extiende entre Argentina, Bolivia, Brasil y Paraguay.
Según Byron-Cox los esfuerzos intergubernamentales para revertir el daño provocado por la desertificación están surtiendo efecto, y son un ejemplo de lo que se puede lograr cuando los países trabajan de forma coordinadaEl contador Gustavo D´Alessandro, vocal de la Administración Provincial del Agua, participó de la "Convención de Lucha contra la Desertificación" organizada por las Naciones Unidas, y donde compartió debates con representantes de distintos países del mundo, como también con Organizaciones Civiles Sociales, con un claro objetivo puesto en intercambiar técnicas de aprovechamiento del suelo y el agua.
Según explicó el vocal, en este tipo de convención también se dan a conocer nuevas alternativas de financiamiento de obras con fondos de organismos tanto internacionales, como de entes privados no gubernamentales que apoyan a la recuperación de las tierras y los proyectos hídricos de pequeña, mediana y gran envergadura.
En la oportunidad, D´Alessandro contactó con representantes de Naciones Unidas por la Comunidad Europea, representantes de Naciones Unidas por Centro América y con el representante de las OSC (Organizaciones Sociales Civiles) en Naciones Unidas. Estos se pusieron a disposición de la APA para colaborar con conocimientos y con fuentes futuras de financiamiento, para llevar adelante obras que atenúen los efectos de la sequía prolongada que atraviesa la provincia del Chaco.
Como corolario, el funcionario destacó que la APA fue el único organismo público que se hizo presente de todo el Noreste argentino. Se pudo, además, plasmar toda la problemática climática que aqueja a la región, como también dar a conocer las necesidades que se pueden mitigar con la participación de estos organismos internacionales.
afrol News, 7 de Octubre - Las sequías podrían afectar hasta el 70% de los suelos del planeta en 2025 si los países no implementan políticas para detener la desertificación.
Así lo advirtió el secretario ejecutivo de la Convención de la ONU de lucha contra la Desertificación, Luc Gnacadja.
Luc Gnacadja sostuvo que no habrá seguridad global, si no hay seguridad alimentaria en las regiones secas.
Al finalizar la reunión sobre el tema celebrada en Buenos Aires, Gnacadja subrayó que es necesario un acuerdo para que los países en desarrollo combatan la desertificación.
Por último, Gnacadja señaló que actualmente las sequías afectan más del 40% de los suelos del planeta.
Por staff writer
© afrol NewsPor Agencia EFE – hace 23 horas
Un desacuerdo entre los países demora el cierre de la Convención sobre la desertificación |
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Buenos Aires, 2 oct (EFE).- El cierre de la Convención de Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (UNCCD) que se celebra en Argentina se demoró hoy por el desacuerdo de los países en la inversión que debe aportar cada uno para el funcionamiento y la financiación de estrategias del organismo de la ONU.
"Se necesita que los países inviertan en la tierra, en la gente para evitar la desertificación y la degradación de los suelos", sostuvo este viernes el secretario ejecutivo de la UNCCD, el beninés Luc Gnacadja, durante una breve rueda de prensa en medio de las discusiones que se desarrollan en un hotel de Buenos Aires.
Gnacadja explicó que aún no hay acuerdo sobre el proyecto de presupuesto para programas de la Convención, destinado al bienio 2010-2011, que establece el monto que deben aportar cada uno de los 193 países que forman parte del organismo de la ONU.
El proyecto establece montos superiores para las principales economías globales, encabezadas por Estados Unidos, que debería aportar 5.507.460 dólares en el bienio 2010-2011 en caso de aprobarse el texto original.
Detrás de EE.UU., los mayores desembolsos deberían salir de Japón, Alemania, Reino Unido, Francia e Italia, según el resumen del proyecto, que espera ser aprobado entre las últimas horas de hoy y las primeras de mañana, sábado.
"Hay algunos compromisos de los países desarrollados con los países más pobres, pero estamos tratando de impulsar esa asociación y lograr mejores inversiones" para combatir los efectos de la desertificación, añadió Gnacadja.
El secretario ejecutivo de la UNCCD se mostró a favor además de que los países realicen mayores inversiones en energías renovables para evitar una mayor degradación de los suelos.
Expertos reunidos en el encuentro de la ONU advirtieron esta semana sobre la relación entre la degradación de la tierra y el cambio climático y reclamaron estrategias comunes para atajar el problema.
La reunión, a la que asistieron más de 70 ministros y jefes de delegaciones de los 193 países que participan en la UNCCD, permitió a los expertos denunciar el "gran efecto" de la degradación de la tierra en la seguridad alimentaria, explicó días atrás la ministra de Medio Ambiente de Namibia, Netumbo Nandi-Ndaitwah.
Los expertos alertaron incluso sobre la cercanía de una "tormenta perfecta" por la convergencia de factores como el cambio climático, la degradación de las tierras y la crisis alimentaria, lo que pondrá a prueba la supervivencia humana, dijeron.
Según datos de la UNCCD, se calcula que cerca del 40 por ciento de la superficie terrestre está clasificada como tierra seca, y que, desde 1990, un porcentaje adicional de entre el 15 y el 25 por ciento se ha degradado o entró en proceso de degradación.
© EFE 2009. Está expresamente prohibida la redistribución y la redifusión de todo o parte de los contenidos de los servicios de Efe, sin previo y expreso consentimiento de la Agencia EFE S.A.
Casi el 70% del planeta estará afectado por la sequía en 2025 en caso de no aplicar políticas para frenar ese flagelo, dijo este viernes Luc Gnacadja, secretario de la Convención de la ONU de Lucha contra la Desertificación, al concluir una conferencia en Buenos Aires.
"Si no podemos solucionar este problema de la tierra, en 2025 casi el 70% estará muy afectado", sostuvo Gnacadja.
Actualmente la sequía afecta al menos al 41% del planeta, y el proceso de degradación se incrementó entre 15% y 25% desde 1990, según un informe sobre la situación climática mundial brindado a la prensa durante el encuentro.
Gnacadja evaluó la gravedad del panorama a futuro en el cierre de la IX Conferencia de las Partes (COP09) de la Convención de las Naciones Unidas para la Lucha contra la Desertificación (UNNCCD), que se realizó entre el 22 de setiembre y el 2 de octubre en un hotel de Buenos Aires.
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El funcionario afirmó que en el encuentro se acordó la necesidad de monitorear y determinar los indicadores para conocer en detalle la situación actual, el progreso y cómo luchar contra la desertificación.
Además, destacó que "no hay seguridad mundial sin seguridad alimentaria" en las zonas secas y que "se necesita un acuerdo verde" por parte de los países desarrollados para trabajar en esos lugares, al aludir a la necesidad de un compromiso político de las potencias.
Gnacadja informó que el próximo encuentro de la Convención de la ONU de Lucha contra la Desertificación se llevará a cabo en Corea del Sur en 2010.
Con respecto al cambio climático, el funcionario aseguró que "los países deben luchar e invertir en la tierra y en la sociedad para combatir el efecto invernadero".
"La obtención de recursos financieros es importante en la estrategia. Entonces, debemos movilizar a todos los involucrados", agregó.
El secretario de la UNNCD señaló que "no se esperan nuevos compromisos (de las potencias), sino que digan qué problemas tienen para cumplirlos", además de manifestar que "se espera que el sector privado también participe y demuestre su dinámica de trabajo con el suelo".
Gnacadja sostuvo que hay una relación directa entre desertificación y cambio climático, y abogó por una mejor sinergia y cuidado del suelo para que "el proceso se transforme en un círculo virtuoso".
Por otra parte, durante la conferencia se identificaron dos problemas cruciales para la lucha contra la desertificación.
Primero, saber cuál es el porcentaje de población mundial que vive sobre la línea de pobreza en zonas desérticas y, además, realizar mediciones sobre el suelo, teniendo en cuenta el cambio climático en las zonas secas.
La convención de la ONU, en la cual disertaron 250 científicos de todo el mundo, trabajó sobre tres ejes: Conferencia Científica, Mesa Redonda Ministerial y Discusión del Programa de Trabajo para 2011.
Gnacadja destacó que todavía quedan cosas pendientes por tratar, como el Programa de Presupuesto y el de Trabajo, referidos a las estrategias necesarias para la distribución del dinero para solucionar la desertificación en la Tierra.
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Presentan documental sobre efectos de desertificación en poblaciones | ![]() | ![]() | ![]() |